El mundo de la enseñanza está en continua renovación: sus metodologías se adaptan a los nuevos tiempos y a las sociedades en las que se desarrollan. ¿O quizás estas últimas son el reflejo de las primeras? Sea como sea, no cabe duda de que los equipos docentes deben mantener siempre una actitud abierta y analítica sobre los logros alcanzados y el camino recorrido hasta llegar a ellos. Buena prueba de ello son las metodologías de enseñanza que enumeramos en este artículo y que aplicamos en Linkia FP de dos maneras distintas: por un lado, en nuestra Grado Superior educación infantil a distancia y, por otro, en nuestra propia dinámica como centro de educación a distancia.
Las metodologías de enseñanza más innovadoras
Indudablemente, los tiempos han cambiado. Y también las metodologías de enseñanza, que no pueden ser como hace 50 años, pues las necesidades y los retos son distintos. A continuación te mostramos algunas de las más innovadoras, que buscan precisamente esa adaptación.
1. Comunidades virtuales
Esta metodología de enseñanza es probablemente el ejemplo perfecto de la idea expresada en las anteriores líneas: hace varias décadas, las tecnologías de comunicación eran aún bastante rudimentarias y la educación era 100% presencial. Pero ahora las nuevas tecnologías son un elemento básico de nuestra sociedad, por lo que están plenamente integradas en el mundo de la educación. Y más aún tras el zarpazo de la pandemia del coronavirus.
Esta metodología conocida como ‘comunidades virtuales’ es, precisamente, un intento de estructurar y organizar la enseñanza online, tejiendo una eficiente red para evitar que el alumno tenga que enfrentarse en solitario a la fría pantalla. En esta metodología, el profesorado deja de ser un mejor transmisor de información para adoptar también otros roles, como asesor, moderador o ‘facilitador’, un concepto que ahora adquiere una especial relevancia. Y el alumnado obtiene una competencia que no existía hace años y que es fundamental en el mundo laboral actual: la correcta desenvoltura en un entorno digital.
Enumeramos esta metodología en primer lugar y le dedicamos más espacio que al resto porque es una de las que más peso tiene en Linkia FP: basamos nuestro modelo en la formación online a distancia, logrando que los alumnos obtengan su titulación FP al mismo tiempo que adquieren plenamente la mencionada competencia tecnológica.
2. Flipped Classroom o Aula Invertida
Se trata de una de las metodologías de enseñanza que lleva ya unos cuantos años aplicándose y que inspira a su vez a otras relacionadas. Se basa en invertir el clásico reparto de tareas a realizar en el aula y en casa. Si hasta el momento lo establecido es impartir lecciones en el aula y realizar ejercicios prácticos en casa, lo que se plantea ahora es lo contrario: el alumno estudia la lección en casa y se pone en práctica en el aula, con la ayuda del profesor, quien tiene los conocimientos, la experiencia y las herramientas para hacer que esa puesta en práctica sea exitosa.
3. Movimiento maker
Esta metodología tiene un componente eminentemente práctico y muy ligado a las disciplinas de carácter tecnológico. Se basa en el concepto DIY (Do It Yourself) y aprovecha las posibilidades del software abierto y las impresoras 3D de uso doméstico. Con estos y otros mimbres se puede organizar una dinámica de trabajo organizada en grupos, con sus respectivos proyectos y objetivos. El profesor actúa como asesor y resolutor de problemas, guiando a sus alumnos en el proceso, quienes desarrollan por sí mismos competencias como el emprendimiento, el trabajo en equipo y el pensamiento lógico.
4. Aprendizaje cooperativo
La filosofía de esta metodología de enseñanza surge como respuesta a la gran contradicción de la escuela clásica: si el mundo laboral es esencialmente trabajo en equipo, ¿por qué la educación en el aula se plantea de modo individualizado y unidireccional? En cambio, el aprendizaje colectivo reestructura el aula para dividirla en grupos de entre 3 y 6 alumnos, con el profesor en el papel de guía y asesor pero sin desviarse del objetivo principal: que los alumnos aprendan en cooperación. De esta manera, esos alumnos no solo aprenden la lección, sino que también extraen enseñanzas durante el camino recorrido hasta ese destino. Por ejemplo, el reparto de roles o el trabajo estructurado por fases.
5. Gamificación
Esta es una metodología de enseñanza que tiene mucho éxito entre los alumnos de menor edad, pero también entre los adolescentes y universitarios. En el primer caso, a través de juegos sencillos, ya sean grupales, manipulativos o de cualquier otro tipo. Y en el segundo caso, con una vertiente más tecnológica, basada en videojuegos. Esta gamificación no solo tiene que ver con la dinámica a seguir para la adquisición de conocimientos, sino también con los métodos de motivación y evaluación, por ejemplo con sistemas de premios y recompensas, conceptos todos ellos presentes en nuestro post sobre cómo encontrar la motivación para estudiar. Y no cabe duda de que el juego fomenta la predisposición positiva para el aprendizaje.
¿Cuál es la mejor de todas estas metodologías?
Resulta difícil establecer cuál es la mejor de todas las metodologías de enseñanza, pues depende de muchos factores. Por ejemplo, de los objetivos que se desean lograr. O de las capacidades y predisposición del profesorado. O incluso de las características del alumnado y del centro. Probablemente, una buena idea es la combinación de varias de esas metodologías. O incluso aplicarlas de manera independiente según la asignatura.
Pero lo que está claro es que no desplazarán a la metodología clásica de enseñanza, al menos de momento. Sin embargo, eso no evita que la enseñanza tradicional debe adaptarse a nuevas técnicas, como también hemos explicado en otros posts con ejemplos de reglas mnemotécnicas y explicaciones sobre qué son los mapas mentales.
En la fp online tenemos en cuenta todo ello y lo aplicamos a nuestra metodología de enseñanza a distancia que, pese a ello, combina lo mejor de la formación clásica y lo más innovador de las nuevas propuestas.
